Novedades / Gacetillas de Prensa (contenido no verificado por El Ángel del Vino)

viernes, 29 de agosto de 2025

Yacoraite

Viñedos Yacoraite

Vinos de altura con alma andina

En el corazón de la Quebrada de Humahuaca, a 2.777 metros sobre el nivel del mar, Viñedos Yacoraite combina la fuerza de la montaña, la visión del cóndor y la hospitalidad de una mesa andina. 

Un proyecto que nació de un sueño y hoy es realidad, rodeado de viñedos y con una de las vistas más espectaculares: la “Pollera de la Colla” justo enfrente. La historia comienza con Alejandro Izquierdo, de padre jujeño, quien en 1993, viviendo y trabajando con su mujer en Washington para el Banco Nacional de Desarrollo, se decía: “Algún día me gustaría tener algo en Jujuy”.


En 2013 compró seis hectáreas y al año siguiente comenzó a plantar la que sería la sexta viña más alta del mundo, en un lugar sumamente desafiante porque si bien la mayor parte del año los días son lindos y con sol, el frío en invierno se impone (abajo foto de los aspersores para defender las plantas de las heladas) y cuando llueve fuerte los aludes pueden arrastrar todo a su paso, obligando a costosos trabajos de canalización, como los que se observan en la foto abajo a la derecha.

En 2016 sumaron más Malbec y Cabernet Franc, guiados por el agrónomo Ezequiel Bellone, quien comparó la acumulación térmica de la zona con la del Valle del Loire.

Los vinos: vertical de Mallku y más

Los vinos de Yacoraite no se elaboran en el lugar, sino en la bodega que comparten Ezequiel Bellone y Lucas Niven, en San Salvador de Jujuy.

 Compralo haciendo click acá

Con el tiempo llegaron nuevas variedades: Merlot, Chardonnay, Riesling, Torrontés… y una uva italiana llamada "Bellone" que Ezequiel encontró en el catálogo de un vivero italiano cuando buscaba las plantas de Riesling y, atraído por la coincidencia con su apellido, hizo traer 500 plantas, de la cual destaca que es una uva resistente a bajas temperaturas.

En el salón del restaurante, que ofrece una vista impresionante hacia los viñedos y los cerros, hicimos una vertical de Mallku Malbec, vinos que pasan de 18 a 20 meses en barricas y cuyo nombre en aymara y quechua significa "líder de la comunidad, gobernante con sabiduría de montaña y visión de cóndor".

  • Mallku 2017 – Con paso por barricas usadas, sin filtrar.

  • Mallku 2018 – Con roble francés y húngaro de primer uso.

  • Mallku 2019 – Segundo uso de barricas, con plantas ya equilibradas.

  • Mallku 2020 – Elegante, en guarda.

  • Mallku 2021 – A esperar.

  • Malku 2022 y Mallku 2023  – marcadas por heladas que redujeron rendimientos a menos de 1.000 kg por hectárea y generaron cierto desequilibrio.

Otra joya es el Naranjo: Torrontés, Riesling, Chardonnay y Bellone macerados con pieles durante 40-45 días, fermentados a baja temperatura y con reposo en barricas usadas. Frescura, acidez natural y personalidad.

En tintos, el Mallku Cabernet Franc tiene su propia historia:

  • 2021 – Piracina roja, tomate, morrones asados y fondo vegetal; no pasó por barrica.

  • 2022 – Mezcla de piracinas rojas y verdes, producto de heladas y rebrotes.

  • 2023 – Cosecha despareja, estilo más cercano a 2021.

Los cortes también dicen presente:

  • Malco Gran Corte 2022 – Cabernet Franc, Merlot y Malbec.

  • Mallku Gran Corte 2023 – En evolución.

Restaurante Inkillay: gastronomía con raíz andina

El restaurante de Yacoraite, Inkillay, ofrece una experiencia donde la cocina y el paisaje dialogan. La carta se inspira en la gente, los cerros y el mundo andino. 

 
 

Los platos se elaboran con productos locales bajo el concepto kilómetro cero (quinoa, tubérculos, carnes fuertes, trucha) y siguiente técnicas ancestrales reinterpretadas con presentación lúdica.

  • Calapurca, sopa típica servida con piedra caliente.

  • Caolín, carnes cocidas durante horas envueltas en una costra de barro.

  • Rescoldo, cocción bajo tierra.

El cierre de la visita se realizó probando un vermut a base de vino naranjo, macerado con rica rica, suico y otras hierbas locales y un brindis con el espumante de Chardonnay del valle templado, que cuenta un paso de 18 meses sobre lías.

Pero antes de irnos encontramos una última sorpresa, pese a que los paisajes desde la terraza invitaban a quedarse mirando el cerro la Pollera de la Coya, nos animamos a bajar a las sombras de la cava suberránea, para descubrir que, además de guardar las distintas añadas de los vinos de Yacoraite, cuenta con una importante colección de máscaras de carnaval jujeño que vale la pena admirar.

En Yacoraite, el vino no es solo bebida: es cultura, paisaje y memoria. Aquí, a casi tres mil metros de altura, la altura se convierte en alma.


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Cuando dejas tus comentarios nos ayudas!