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miércoles, 5 de noviembre de 2025

Restaurante Los Bocheros

Restaurante Los Bocheros

Encuentro en Las Compuertas

Nuestra visita a Bodega Lamadrid tuvo un sabor especial. No solo por reencontrarnos con la historia y el espíritu de Guillermo García Lamadrid (su propietario), sino también por descubrir una nueva joya en su universo: el restaurante Los Bocheros, recientemente galardonado con una mención Michelin.

La cocina está a cargo del chef Lucas Olcese, a quien ya conocíamos por su trabajo en el Rosell Boher Lodge, y que aquí despliega un menú que dialoga con el paisaje y la identidad de Las Compuertas.

Probamos el menú de cuatro pasos, que abrió con pan de masa madre y aceite de oliva virgen extra de 98 puntos —un must absoluto—, mientras brindábamos con el Lamadrid S.V. Reserva Chardonnay 2023, del cual se elaboran apenas dos barricas: una con maloláctica y otra sin. Este vino proviene de media hectárea de Chardonnay que plantaron recientemente, marcando un nuevo capítulo para la finca.

Sabores que cuentan historias

La primera entrada fue una chistorra de conejo con escabeche de vegetales, cebollas moradas encurtidas y papel de arroz, seguida por la exquisita empanada Los Bocheros, que acompañamos con Peñón de Agrelo Malbec 2024, elaborado con uvas de Finca La Matilde.

El viaje, enfocado en explorar la I.G. Las Compuertas, despertó naturalmente mi curiosidad: ¿habría algún vino con uvas provenientes de los viñedos ubicados a pocos metros del restaurante? Allí crece una colección de 14 cepas distintas, plantadas con el objetivo de mostrar sus características al visitante. Por suerte, la respuesta fue afirmativa: con todas ellas elaboran una edición especial llamada Peñón de Las Compuertas Corte de Finca, un vino que sintetiza el espíritu del lugar y maridó de diez con una provoleta vestida con panceta y cherries.

 

El corazón del almuerzo

El tercer paso fue una costilla a baja temperatura con tubérculos de la huerta, acompañada por Los Bocheros Malbec 2024, proveniente de Finca Lamadrid, sin madera y elaborado en tanque de acero inoxidable.

Ese momento marcó también el inicio de una amplia degustación de vinos de la bodega, en la que pudimos disfrutar etiquetas que hablan del trabajo y la evolución de su equipo:

  • Peñón de Agrelo Cabernet Franc 2024 proveniente de Finca La Suiza, en Agrelo, de aromas especiados y terrosos y largo y fresco final, 

  • Lamadrid S.V. Bonarda 2024 (Luján de Cuyo), imperdible representante de esta cepa.

  • Lamadrid S.V. DOC Luján de Cuyo 2024. de parcelas seleccionadas de Finca Lamadrid, en Agrelo, que permite disfrutar -a buen precio- un vino elaborado siguiendo las exigentes reglas de la denominación de origen.

  • Lamadrid S.V. Gran Reserva Cabernet Franc 2022  fermentado en huevos de concreto y criado en barricas durante 18 meses.

  • Matilde Lamadrid Malbec 2021 de gran concentración y balance, fermenta en barricas de roble francés y luego se cría por 24 meses en barricas de primer uso.

  • Guillermo 2022 Cabernet Sauvignon, un vino muy especial, que el equipo de la bodega y las hijas de Guillermo elaboraron en secreto, como regalo sorpresa por su cumpleaños.

El dulce final y una burbuja única

Para los postres, compartimos las tres opciones del menú: volcán de chocolate blanco, panqueque de dulce de leche con helado y frutos rojos, y peras con queso brie y almendras.

El cierre, como no podía ser de otra manera, fue con un brindis. Allí descubrimos un detalle encantador: como Bodega Lamadrid está certificada para elaborar espumantes -se iniciaron en esta categoría con el Pet Nat de la línea ZunZun-, decidieron aprovechar las uvas de Chardonnay recientemente plantadas en Agrelo para crear un espumante exclusivo Lamadrid Extra Brut 2023, que solo se sirve en el restaurante Los Bocheros. ¡Impecable!

El restaurante ofrece también menús de dos, tres y siete pasos, ideales para distintas ocasiones, siempre enmarcados por la calidez del servicio y la hospitalidad de todo el equipo.

Un oasis verde en el desierto

Si hay algo que merece un párrafo aparte en Lamadrid son sus jardines, de un verde tan intenso que parece imposible creer que uno está en Mendoza. Eduardo Ríos (CEO) nos contó que, cuando compraron la propiedad, estaba completamente abandonada y casi todos los árboles secos. Les aconsejaron quitarlos y plantar nuevos, pero Guillermo insistió en darles agua y tiempo. Lo hicieron, y todos —excepto un pino— revivieron.

 

Ese pino, hoy transformado en escultura de una Venus del vino, fue tallado por el mismo artista que creó la obra que se muestra en la entrada de la bodega, que representa al niño que Guillermo dejó atrás hace tantos años.

Este cuidado con el entorno fue reconocido con el Premio Plata en Arquitectura y Paisajes otorgado por Best Of Mendoza’s Wine Tourism, certamen internacional que distingue a las regiones que integran la red Great Wine Capitals, de la cual Mendoza forma parte junto a otras once regiones vitivinícolas de prestigio mundial.

Un homenaje permanente

Visitar Lamadrid es también conocer una historia profundamente humana. La bodega y sus vinos son un homenaje permanente a Matilde Lamadrid, madre de Guillermo, quien forjó su carácter y lo alentó a vivir con libertad, a desplegar sus alas y soñar en grande.


Guillermo es, sin dudas, un hombre generoso, agradecido de la vida y dispuesto a disfrutar su magia. Por eso, si tenés la oportunidad, te recomiendo visitar su bodega en Las Compuertas y vivir esta experiencia en primera persona: una fusión de vino, paisaje, arte y emoción que deja huella.



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